domingo, 22 de mayo de 2022

EL ADVERTIDO

Vengo de la locura. De un rayo que partió 
en dos mi vida. Nadie puede dar por sentada 
su realidad, que tan mansa parece ahora. 
Sólo la poesía fue lo que me sostuvo, 
mi verdadera tabla de salvación, hundido 
en el horrible pozo de un ánimo violento 
en sus vaivenes. Canto con serena alegría 
la salud mejorada por más que no haya nunca 
garantías de que de nuevo, en el futuro, 
no vuelva esa dolencia. Me muevo en un presente 
que, escéptico, sonríe con ganas y a la vez 
se cuida. Nunca afirmes que estás libre de tales 
desgracias. Nunca creas que tu psique está a salvo 
totalmente. Los rayos golpean porque sí. 

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