sábado, 1 de octubre de 2022

Y NO SUPE SU NOMBRE



Callado, de mirada 
torva, toda la tarde 
aguardaba parado 
el pan que en una bolsa 
le daban y volvía 
a su casa a comer 
de ese Cristo. La ruda, 
la ríspida epilepsia 
padecía y tendido 
se quedó ahí nomás, 
vertiginosa cruz 
en la vereda. Ha muerto 
hará casi dos meses. 
Versos en oración, 
hombre que conocí. 

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

EN EL NOMBRE NO ESTÁ LA COSA

Catorce letras tienen  el nombre y apellido  con que firmás. Podría  escribir un soneto  en el que encabezaran  cada línea. Infinitas  las p...